EVACUACIÓN DE HOSPITALES

La evacuación de hospitales, clínicas o sanatorios es un recurso de última instancia que debe considerarse cuando ya no resulta posible “refugiarse” o “defenderse” en el lugar.
Si bien la evacuación de hospitales es bastante infrecuente , lo cierto es que ningún centro de salud es inmune a una situación que pueda forzar una evacuación; todas las organizaciones de salud deben estar preparadas para manejar no sólo una potencial evacuación, sino también la delicada tarea de trasladar a sus pacientes a instalaciones más seguras en caso de ser necesario.
Evacuar un centro médico es una tarea costosa y complicada.
Es importante que las organizaciones prevean el peor de los escenarios y adapten su plan a
esa posible contingencia, incluso con cierto margen.
Un buen plan comienza con una meticulosa evaluación de las vulnerabilidades específicas del centro y de la comunidad y se centra en las contingencias más probables.
Si bien resulta imposible para un hospital o centro planificar todas y cada una de las posibles emergencias o escenarios, las bases del proceso de evacuación serán similares, sin importar la causa.
La comprensión y el entrenamiento del personal en los principios de una evacuación segura han sido citados varias veces como esenciales para obtener buenos resultados.