EVENTOS ADVERSOS EN HOSPITALES

Hay una limitada información acerca de los tipos de daños relacionados con la atención médica en los sistemas de salud de países de medianos y bajos ingresos. La mayoría de la información disponible surge de países desarrollados, y la misma es muy similar. En Norteamérica, Europa, Australasia y muchas partes de Asia y el Oriente Medio, el análisis de la información que surge de los reportes y los estudios de investigación en seguridad muestran un patrón sorprendentemente consistente.
En todo el mundo, los pacientes sufren daños durante su atención en centros de salud y mueren innecesariamente. Son lesionados o discapacitados a consecuencia de infecciones asociadas al cuidado, errores de medicación o fallas durante la realización de procedimientos. Pueden resultar heridos a consecuencia de caídas, sufrir diagnósticos erróneos o experimentar las consecuencias de una mala gestión clínica de sus enfermedades agudas. Pueden a su vez ver complicada su evolución a raíz de úlceras por presión, o sufrir daños por equipos defectuosos o mal utilizados, o por personal incompetente. Estas son solo algunas de las distintas fuentes de daño, y la escala del mismo varía. La carga global de daños asociados a la hospitalización no se ha reducido drásticamente durante la última década, a pesar de la prioridad sin precedentes que se le ha dado a la seguridad del paciente dentro de estos sistemas de salud de países desarrollados. Muchos de estos daños son potencialmente evitables. El costo humano para los pacientes y sus familias es muy preocupante.
Menos se sabe sobre el nivel y la naturaleza de los daños que se producen durante la atención primaria, por lo que se debe trabajar para aumentar la comprensión de lo que sucede en este ámbito (7-9). A nivel mundial, hasta cuatro de cada diez pacientes son perjudicados durante su atención primaria o ambulatoria. Hasta el 80% de estos daños podrían prevenirse. Algunos de los errores más perjudiciales se relacionan con el diagnóstico, la prescripción y el uso de medicamentos. En países de la OCDE (Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico), el daño al paciente durante su atención ambulatoria puede representar más del 6% del total de días/cama y más de 7 millones de admisiones (10)
En los países de ingresos bajos y medios, la falta de infraestructura, de instalaciones y los problemas de acceso agregan causas adicionales y muy importantes de daño.
También resulta útil tener en cuenta la división conceptual de los incidentes de seguridad del paciente en tres tipos: casi accidente (near miss), incidente sin daño, e incidente con daño, como se estableció en el “Marco Conceptual de la OMS para la # 20 Biblioteca Virtual NOBLE |Diciembre 2020 Clasificación Internacional de Seguridad del Paciente (11) (Figura 1). Las definiciones de estos tres tipos son:
- Casi accidente (Near Miss): un incidente que no llegó al paciente (ej: una vía de transfusión conectada a un paciente equivocado, pero donde el error es detectado antes de iniciar la transfusión,)
- Incidente sin daño: aquel que alcanza al paciente, pero que no le ocasiona daños discernibles (por ejemplo, si se transfundió finalmente la sangre al paciente equivocado, pero este era compatible)
- Incidente con daño: un incidente que resulta en daño al paciente (ej: se transfundió la sangre al paciente equivocado, y este falleció por una reacción hemolítica. Con respecto a los incidentes con daño, un “evento adverso” es un incidente en el cual el daño era prevenible, mientras que una “reacción adversa” define a un daño que no era prevenible y que resultó de una acción justificada y bien realizada para ese lugar y circunstancia.
Fuente: “Patient Safety Incident Reporting and Learning Systems. Technical Report and Guidance” (WHO, 2020). Traducción: Dr. Fabián Vítolo. NOBLE Seguros